Da igual que método utilice; las características básicas de casi todos los panes cambian un día después de salir del horno. Los que no vayan a consumirse en 24 horas es mejor envolverlos en plástico y congelarlos. La congelación impide la mayoría del crecimiento microbiano, retrasa el revenido y endurecimiento y controla la humedad. A continuación, […]